lunes, 15 de marzo de 2010

Producto de mi imaginación. No entiendo cómo se hace para aferrarse a algo sin algún lazo concreto. No sé cómo bailan los que no escuchan. O qué contás cuando no tenés historia. No me sale entender por qué me aferré a algo que fue nada, momentos vacíos, palabras sin sentido. Como buscar lo que no está perdido. Saltar sin soga, correr descalza, subir bajadas, tropezar, caer y quedarme tirada. ¿Por qué tengo ganas de verte? ¿Por qué vine si no estaba invitada? Hay tantas cosas que no quiero aceptar. Como que me hago creer que entre vos y yo hay algo más, como que si tu partido ya se hubiera terminado estarías pateando conmigo. Como que tu mirada me invitara a mantener la calma, aguardar.. comprar paciencia y sentarme a esperar. Inventar, no hago más que inventar. Y creo que ya es hora de prender la luz: lo único que siempre hubo fueron mis ganas, buscarte, provocarte, sin llegar a ningún lado, con la esperanza absurda de que me apostés una ficha. Esta ruleta no va y no es tu culpa, mi problema viene de antes: es que hay un tipo con el que jugué y se llevó la mejor parte. Y no pareció importarle. Y ya dispuesta a no seguir aburriéndote con esto, prometo aceptar que no va ni vino, ni estuviste conmigo: triste por algo que nunca fuimos. Malestar general.
Y aunque no tenga algo concreto que decir, escribo. Aunque no logre despertar las palabras que necesito, estoy sentada haciendo el esfuerzo. Hay algo que llevo dentro pero no le conozco la cara, no sé cómo se llama. Ya son varias las lunas que me ven intentando dormir. Estoy en mi cama y el sueño no quiere venir. Estoy cansada de vivir de los recuerdos, de acordarme de tu nombre, de pronunciarte. Me aburre conocerte tanto, saber cómo es todo, aceptar el final sin haber empezado. La angustia me acompaña hasta en el día: pensarte, cuestionar lo que nunca pasó, vivir de la nada. Y como ya aprendí a disimular, todo el día te puedo pensar y ni mis ganas se van a enterar. Te tengo anclado, vagabundeando en mi cabeza así como si nada. Perdiendo el tiempo. ¿A dónde quiero llegar? No confío en mi presente, no encuentro el modo. Solo puedo caminar y caminar, sin estación donde frenar, sin sentido, sin pisar. Despertar, un día más.. ¿Algo interesante se va a asomar? Y estos ojos borrachos de mirar ya no quieren parpadear, ni observar. Bendito sea el día cuando deje de pensar. Qué estúpida.

martes, 9 de marzo de 2010

Ese día que me dejaste conocí la verdad con cara de puñal. Cuando te alejaste aprendí lo que tarda en terminar un para siempre. Menos mal que mentiste: así se derrumbaron mis pilares y esos en lo que creía. Y cuando me hicieron sufrir, comprobé que aún vivía; esa vez que sin darte cuenta me presentaste a Date Por Vencida. Si todavía estuvieran aquí no sabría lo que es sentirse vacía. Ese jueves cuando me soltaste me regalaste el sabor de la caída. Cuando ni me mirás! A vos te debo mis bajas de autoestima. Salvar tu pellejo me costó un puñado de dignidad que ya di por perdida. Aprendí a llorar por dentro, a esconder parte de lo que siento. A olbigarme a dudar todo el tiempo. Con ustedes aprendí a retroceder. Con tu jueguito venía de premio la experiencia de la mala amiga; con esos secretos que guardamos conseguí acercarme a las mentiras. Y con todos tus rechazos estoy en duelo con la valentía. Pero en fin, sinceramente gracias, al menos no perdí el tiempo: aprendí tantas cosas que juro, no me arrepiento.

Siempre lo bueno se hizo esperar, siempre le costó llegar. Entonces vale más, y merece la pena.. y cuando viene hay que hacerlo durar! Lo bueno se sale a buscar. Todo lo que está por venir, en cada oportunidad madura una parte de mí. Y lo que va a ser, lo que vamos a dejar pasar.. Y VIVIR! Lo bueno está por venir..
Amar aunque duela.
Buscar soluciones.
Cerrar heridas.
Dar pelea.
Equivocarse.
Festejar.
Ganar confianza.
Hacer caminos.
Inspirarse.
Jugar limpio.
Keep trying.
Leer las miradas.
Mirar para adelante.
No decir siempre no.
Olvidar no soluciona.
Perdonar cuesta pero vale la pena.
Quererse si se quiere querer.
Rodeate de amigos.
Sonreí aunque no tengas motivos.
Terminá lo que empezás.
Usá la cabeza.
Viví tu vida.
Work hard.
Xtrañar es no haberlo aprovechado del todo.
Yirá si te aburrís.
Zambullite.
La noche no se quiere dormir, el día se hace esperar. Esas lunas que no cierran mis ojos, esas horas que no quieren descansar. Estoy sentada sobre mi cama y el sueño no me quiere atender. No se qué me mantiene despierta.. será que no quiero volver a soñar? De todos modos el tiempo tiene que pasar, y la mañana de mañana no me lo va a hacer olvidar: mis párpados van a pesar, mi cara lo va a hacer notar. Solo mi boca puede esconder la verdad. Que no me puedo dormir, que no dejo de pensar.. en todo al mismo tiempo; dónde pongo el punto final? No sirven los cuentos, ni las ovejas, ni las canciones: no puedo hacer más que estas oraciones. Otra vez a esperar que se apaguen las ganas, que me tiente la almohada.
Entonces, a quién le importa que consiga lo que quiera?, que gane en mis peleas? que aprenda cuando pierda? Quién cuida de que nada malo me pase? A quién le importa que no falle? O que esté verdaderamente bien. Quién vive para hacerme feliz? Quién sos, respuesta? Yo, solamente yo, aunque tenga sabor a ego, aunque me de un poco de miedo. Solo yo soy responsable y pienso hacerme cargo. Si no me importa a mí, a quién voy a reclamarle?
Ellos son la mirada más cómplice, la sonrisa más grande, la palabra precisa, el abrazo más fuerte, el silencio oportuno, la fiesta más larga, el recuerdo permanente, el consejo más sincero, la mejor inversión del tiempo. La puerta siempre abierta, ese vaso medio lleno, un paraguas cuando llueve.. partecitas de mi vida. Estrellas que caen del cielo.

No me molesta que me pregunten, me molesta que vos me preguntes; o que pidas algo, que exijás tanto. Ya lo sé, lo tengo todo.. pero ese fue tu modo. No necesito un reloj despertador con tu cara que me repita todo lo que me toca hacer para saldar esa cuenta pendiente con vos. Despertar en la mañana, ver tu sombra que merodea la casa; que pregunta cómo estoy, dónde voy, qué no hice hoy. Y todo lo insoportable que podés ser, lo mucho que me cansás, esas ganas reprimidas de gritarte que no te aguanto más: todo es proporcional a lo mucho que te quiero, a lo bastante que influís en mí. Es proporcional a lo mucho que me duele no aceptarte como sos, al imposible sueño de que cambiemos. Y tal vez cuando no estés, más después o menos antes; por fin te dé la razón y te entienda del todo, y me culpe de perder el tiempo desparramando los momentos..
1, 2, 3 minutos para hablar con vos. 4, 5, 6 excusas para verte llegar. 7 vidas te podría esperar. Pero 1 más 1 no es 2. Y a mi escala de los 1001 valores no le gusta que seamos 3. 10 cosas que cambiaría de mí, y volver 1 año atrás. Si solo fuera cuestión de contar.
Mozo algo está mal en mi sopa. No está salada ni deshabrida, no está áspera ni liviana.. no le falta ni le sobra nada. Ni siquiera está seca, o demasiado mojada. Mozo, qué tiene mi sopa? Podría responderme? Es poco interesante: no me tienta. No está fría, no le sobra calor. El plato está bien, un poco más profundo no podía ser? Cuál es el problema de mi sopa? Ya lo creo, es un espejo, una especie de analogía. Mozo, la sopa está ABURRIDA! Como mi vida, como mi vida.. Estoy que me quedo dormida, en cualquier lugar, en una esquina: a esta sopa le falta diez cucharadas de adrenalina.
Mis sonrisas, tus fracasos, tu disgusto en mi plato.. y yo que muero por vos. Cómo duele no ser parte de tu solución. Yo sé que no puedo hacerte mejor, ni peor; ser tu voz interior, y hacerte ver que, aunque duela, aunque el sol hoy no salió; siempre hay algo que espera por vos. Tarde o a destiempo vas a tener que aceptar mirar para adelante, es lo que más te va a ayudar. De nada sirve el lamento de lo que pudo ser, ni tu culpa, ni tu llanto, esas ganas de retroceder y hacer lo debas hacer para que al fin te salga bien. Eso que no fue, eso que te tiene mal. si todo diste no tenés por qué llorar. Tenés que dejar de esperar y buscá lo bueno en cada cosa; sacá las espinas y quedate con la rosa, hasta que de nuevo puedas pelear; hasta que otra vez te puedan lastimar. A mí nunca me vas a fallar, aunque sé que con eso no te voy a conformar.
Qué hora es?, pregunté. Es ahora contestó. Estaba parada frente a mí; me miraba fijo, como buscando que le diera la razón. Caminaba tranquila, con pasos largos y firmes. Se detuvo y volvió a mí. Qué esperás?, me preguntó con la voz entrecortada. No tenía miedo.. juraría que era pena lo que sentía por mí. Intenté explicarle que mi reloj se había roto, que siempre encontraba la manera de que alguien más me alineara las agujas del reloj. Intenté que entendiera que no era algo sobre lo que pensara, ni siquiera lo hacá a propósito. Fue en vano; se burlaba de mí, y cuando al fin desistí me gritó: Es ahora, antes ya pasó y el después solo viene después del ahora.. pero siempre es ahora. Ahora tenés que soñar, que luchar, que olvidar. Le pregunté para qué había venido (era tarde y comenzaba a fastidiarme). Tarde? El cuerpo le temblaba, sus ojos parecían querer escapar de la cara, su voz estallaba y creí verla intentar samarrearme. Preparáte ahora, viví ahora, disfrutá, sufrí, hacé lo que tengas que hacer! Me voy, ahora te toca a vos..yo, con el papel de tu reflejo no puedo hacer más. Entonces me alejé del espejo y le arranqué las agujas al reloj. Siempre es ahora.